lunes, abril 30, 2007

El Murciélago

Fue el último jugador surgido de Atlanta que tuvo una gran trayectoria. Fue clave en el último ascenso a primera del bohemio. Es uno de los símbolos del Boca Juniors ochentoso. Fue uno de los máximos goleadores de los ´80.
Todo eso fue Alfredo Graciani. Jugador histórico y uno de los tipos más queridos en esa época por la hinchada xeneize. Integró una gran delantera junto a Jorge Comas y Jorge Rinaldi, asistida por Carlos Tapia, que sin embargo no cosechó demasiados éxitos.
Como dije, surgió en Atlanta, en la B, donde compartió equipo con el Quique Hrabina. Luego del ascenso jugó en el último año en primera de los de Villa Crespo. A pesar del descenso, a fin de la temporada pasó a Boca junto al "Perro" Rubén Darío Gómez.
En Boca se destacó rápidamente, convirtió muchos goles y se adueñó de la camiseta número 7, con la que quedó profundamente identificado.
Marcó 81 goles con la azul y oro (73 por campeonatos locales) en 250 partidos (218 por torneos argentinos), muchos de los cuales sirvieron para ganar partidos.
Era un típico wing derecho, en el sentido que jugaba mucho más cómodo contra la raya, pero no en cuanto a desbordar para tirar el centro. Le gustaba meter la diagonal y definir él mismo.
Rápido, algo torpe, pero con muchos huevos y oportunismo, solía llegar al gol no sólo encarando por la punta, sino para empujar un rebote.
En La Boca ganó 2 títulos nada más: la Supercopa ´89 y la Recopa ´90. Justo el año del título con el maestro Tábarez estuvo en Racing (según BDFA, sinceramente no me acordaba).
El Murciélago además estuvo en el Lugano de Suiza, en Deportivo Español, en Atlético Tucumán y Argentinos Juniors (ambos en el Nacional B), y en el Caracas FC.
En toda su carrera convirtió un total de 130 goles.
El Alfil (según el apodo que le había puesto Victor Hugo Morales) fue un muy buen jugador, cuyo recuerdo tal vez se vea agrandado porque eran épocas en que Boca no tenía demasiados éxitos, y él era de los que más se destacaban.
De cualquier modo, es sin dudas uno de los íconos de la década, y pasó mucho tiempo (hasta la aparición del Manteca Martínez) para que otro jugador se adueñara de la punta derecha del ataque boquense.


Alfredito anota en un 2-2 contra River

miércoles, abril 25, 2007

9 de oro

Hace casi un año en el viejo y querido Fútbol y Algo Más hice una serie de rankings sobre los mejores jugadores que había visto en mundiales. En el correspondiente a los goleadores elegí a Romario, y destaqué que no ponía al homenajeado de hoy, porque en mundiales no se había destacado, pero que sin embargo lo consideraba el mejor 9 que había visto.
Nació en 1964 en Utrecht, Holanda, y su nombre real es, según varios sitios, Marcel Van Basten (la verdad, me acabo de enterar). Desconozco el por qué del cambio a Marco.
La primer noticia que tuve del holandés fue a través de la SuperFútbol, que le dedicó alguna nota al resurgimiento del fútbol holandés en la segunda mitad de los ´80.
Obviamente, como figura y goleador del Ajax, y como una de las nuevas estrellas de la Naranja, Marco era uno de los destacados en esos informes, en los que se decía algo así como “llamelo Van Gol” (?)
En ese Ajax debutó en 1981, marcando un gol en su primer partido ante el NEC Nijmegen. En el rojiblanco de Ámsterdam (en realidad los 3 equipos más importantes de Holanda tienen rojo y blanco en su camiseta) ganó: 3 ligas (1981/82, 82/83, y 84/85), 3 copas (83, 86 y 87), y la Recopa europea en 1987.
En ese mismo 1987 llegó la única transferencia que tuvo su carrera. Se incorporó, junto a Ruud Gullit al Milan. Silvio Berlusconi intentaba cortar con un largo período sin scudettos del rossonero (desde la temporada 78/79) que había incluido un paso por la Serie B, a raíz de la sanción impuesta a los milaneses por el escándalo del totonero (apuestas clandestinas).
El plan de Berlusconi dio frutos rapidamente. Con la dirección técnica de un (hasta ese momento) casi desconocido Arrigo Sacchi, el Milan conquistó en esa misma temporada 87/88 el scudetto, llevándose un campeonato que el Napoli de Maradona tenía servido. (Algún día haré post sobre ese espectacular equipo)
En Milan obtuvo 11 títulos: 3 ligas (87/88, 91/92, y 92/93), 2 Supercopas italianas (1988 y 1992), 2 Copas de Campeones de Europa (88/89 y 89/90), 2 Copas Intercontinentales (1989 y 1990), y 2 Supercopas Europeas (1989 y 1990).
Los números sólo muestran una faceta de la carrera de Van Basten en el calcio, pero sólo son un elemento estadístico (importante, claro está). Lo mejor de Marco no residió sólo en haber ganado todos esos títulos. Los números, igualmente, arrojan un resultado increíble: entre partidos de clubes (nacionales o internacionales) y de selección, disputó 426 encuentros marcando 299 goles.
Lo mejor estuvo en su extraordinaria jerarquía. Marco Van Basten era como un Mercedes Benz. Unía el lujo a extraordinarias prestaciones, era veloz y confiable.
Fue un terrible goleador, pero además era un tipo muy dúctil, muy ágil, con buen cabezazo y espléndido remate (tanto con derecha, como con zurda), pero además tenía una terrible sangre fría al momento de definir. Difícilmente desperdiciara un mano a mano con el arquero rival.
Dejé para el final su participación en la selección holandesa. Fue uno de los puntales del resurgimiento de la naranja. Si bien no consiguió el éxito a nivel mundialista, fue figura excluyente en el único título oficial conseguido por Holanda, la Eurocopa ´88, disputada en Alemania, en cuya final ante la URSS marcó un gol con una volea impresionante.
No tiene sentido intentar excusar su pobre actuación en el mundial de Italia ´90. Sería necio hacerlo, como también sería de una gran necedad pretender que ese traspié significa que Van Basten fue un jugador más, o no fue un grande.
Se retiró en la temporada 92/93. Una lesión en el tobillo le cortó la carrera antes de cumplir 30 años. Sólo 11 años de carrera profesional hicieron de Marco Van Basten uno de los símbolos del fútbol de todos los tiempos, ¿hasta donde hubiera llegado si jugaba unos cuántos años más?
Tal como con Diego Maradona (en el post del Napoli), Michel Platini y Ricardo Bochini, Marco Van Basten bien vale un youtubeo.

lunes, abril 23, 2007

Indumentaria y éxitos

Recién en la década del ´80 el fútbol argentino conoció lo que se podría llamar la guerra de las vestimentas (?)
Hasta ese momento, poco importaba la marca de ropa de los clubes, incluso de River o Boca (de hecho, si se ven fotos de la consagración de River en 1975, o los triunfos de Boca en la Libertadores 77 y 78, no puede apreciarse qué empresas confeccionaron la ropa. La excepción estuvo dada por el Independiente campeón Nacional 77 y 78, que usaba Adidas).
Los ochenta estuvieron, entonces, marcados por la explosión de las marcas en la camiseta, pero, a diferencia de los ´90 y de la actualidad, sólo 2 marcas dominaron el mercado.
Adidas vestía a la gran mayoría de los clubes. Con contratos que únicamente preveían la entrega de ropa y botines, se había asegurado más de 3/4 de los equipos de primera división.
Su rival era Topper. Su táctica era distinta, si bien tampoco ofrecía grandes sumas, se concentró en 3 o 4 equipos (algunos de ellos de muy buen rendimiento), e incluso, en Ferro, por ejemplo, lucía su nombre de manera más notoria a modo de sponsor.
Lo extraño es que a pesar de esa disparidad, el resumen en cuanto a los títulos obtenidos por equipos vestidos por cada empresa es extremadamente parejo (lo que puede interpretarse como una mayor efectividad de Topper en una ecuación títulos/cantidad de clubes):

1980: River (Sportlandia), Central (Adidas)
1981: Boca (Adidas), River (Sportlandia)
1982: Ferro (Topper), Estudiantes (Topper)
1983: Estudiantes (Topper), Independiente (Topper)

1984: Ferro (Topper), Argentinos Jrs. (Adidas)

1985: Argentinos Jrs. (Adidas)

1985/86: River (Adidas)

1986/87: Central (Topper)

1987/88: Newell´s (Adidas)

1988/89: Independiente (Adidas)

Total: 15 campeonatos:
Adidas: 7 títulos
Topper: 6 títulos
Sportlandia: 2 títulos

viernes, abril 20, 2007

Trivia Ochentosa Nº8

¿Quién es el capitán de Platense que intenta, en vano, detener a Ruben Paz?

Pista: esa (?), que jugó en Platense -fue uno de sus 4 equipos-
LA RESPUESTA
: EN 24 HORAS -aprox.-

Efectivamente se trata de Gustavo Jones, que jugó en Atlanta, Unión, Platense y Chaco for Ever.

martes, abril 17, 2007

4 finales no tan recordadas

Rodolfo Motta, DT de Temperley en 1987, se descompone al enterarse que deberá enfrentarse a Platense en un desempate para no descender.
Desde hace 17 años no se juega un partido (ni una serie) de desempate para definir un descenso de primera división. No cuento para eso las promociones, ya que en realidad no son finales propiamente dichas porque uno de los 2 contendientes tiene ventaja originaria sobre el otro.
Hablo de finales jugadas sin red, en la que los 2 arrancan en igualdad de condiciones, y que en 90 minutos (o 120, en el caso de alargue, definen quien sigue su caso), y en las que ambos equipos vienen de disputar el mismo torneo.
Sin embargo, eso que no hace rato no se ve, se dio en 4 de las 10 temporadas de la década del ´80, estos son esos partidos (lamento no tener los goles, pero no pude conseguirlos de todos los partidos, y por eso opté por no poner los de ninguno):

  • 1982. Unión 1-0 Quilmes(en Sarmiento de Junín)
  • 1986/87. Platense 2-0 Temperley (en Huracán)
  • 1987/88. Racing de Córdoba 1(5)-1(4) Unión de Santa Fe (en Boca Juniors, por penales)
  • 1989/90. Chaco For Ever 5-0 Racing de Córdoba (en Boca Juniors)
Como datos llamativos, Quilmes en ese mismo 1982 fue subcampeón del torneo Nacional que ganó Ferro.
Ningún equipo pudo ganar 2 de estas finales
.

jueves, abril 12, 2007

El Búfalo

Todavía me acuerdo cuando Juan Gilberto Funes llegó a River. Venía de jugar en Colombia (destino bastante importante para los futbolistas argentinos en los ´80), donde se decía que había sido goleador y figura del Millonarios.
En la Argentina sólo había jugado en Gimnasia y Esgrima de Mendoza, y era prácticamente un desconocido cuando Santilli lo repatrió para las semifinales de la Copa Libertadores del ´86, en reemplazo de Ramón Centurión.
Jugó contra Argentinos Juniors en ese grupo de semis, pero tuvo su gran momento en las finales contra el América de Cali. Metió el primer gol en el partido de ida que River ganó 2-1, y el único en el encuentro de vuelta que resultó la primer Libertadores del millonario.
Ese fue el comienzo de su época de gloria. En diciembre de ese año disputó (y ganó) la Intercontinental contra el Steaua Bucarest. Llegó a Tokio como la figura de River (para los japoneses y el marketing), y si bien fue titular, no brilló en ese partido.
Enseguida llegó el llamado a la Selección Argentina campeona del mundo unos meses antes, la disputa de la Copa América ´87 como titular, la 9 en River, notas y disfraces (?) para las revistas deportivas. Pero hubo un partido que marcó un quiebre, encuentro nocturno en Avellaneda, Independiente-River por la Libertadores ´87, River ganaba 1-0 y el Búfalo erró un gol imposible; después de haber eludido a Luis Islas, sólo frente al arco remató, el tiro dio en el poste, y salió. Finalmente, el rojo dio vuelta el partido y River quedó eliminado de la Copa.
Si bien eso no le significó perder consideración, en cierto modo quedó estigmatizado por ese no gol (como el casi gol de Cardeñosa en el España-Brasil del Mundial ´78, salvando las distancias obviamente), y, por si fuera poco, al toque lo vendieron a Grecia (que ni siquiera es un destino demasiado importante ahora, mucho menos en esa época pre-globalización).

Un poco más de un año en el Olympiakos, y pegó la vuelta. Llegó a Vélez Sársfield, club que en esa época armaba buenos equipos pero que nunca ganaba nada (parafraseando al posterior ídolo de ese club, José Luis Félix Chilavert). En Liniers fue dirigido por Basile y, nuevamente, por el Bambino Veira, y jugó con, entre otros, el Tigre Gareca, Mancuso, Ischia y el Pacha Cardozo.
Anduvo bastante bien en el Fortín, pero se lo recuerda fundamentalmente por un Vélez-Boca que los xeneizes ganaban 3-0 al finalizar la primera etapa, y que en el 2º tiempo Vélez lo empató 3-3 con goles del Búfalo, Robinson Hernández y Gareca. Una imagen me ha quedado de ese partido y es casi tan instantánea para mí como la del gol contra el América en la segunda final del ´86: Funes llevándose a la rastra a toda la defensa de Boca, especial y literalmente a José Luis Cuciuffo en la jugada del primer gol de Vélez.
Esa fue su segunda etapa de furor. Era, junto al Beto Márcico y a Ramón Díaz, uno de los jugadores más pedidos por el público y el periodismo para el mundial de Italia ´90 (obviamente de los que no estaban en el plantel), pero el Dr. Bilardo no llevó a ninguno de los 3.
Tenía todo arreglado para jugar en el Niza de Francia, pero le descubrieron un problema cardíaco, algo relacionado con una de las válvulas del corazón (no recuerdo bien). Volvió a la Argentina, luego de que el pase se frustró y comenzó a negociar con Boca (reconozco haberlo puteado un rato largo por eso).
La dirigencia encabezada por Alegre y Heller lo trató muy bien, pero le dijo que sin autorización médica que no podían contratarlo. El diagnóstico científico fue lapidario: “No puede jugar más al fútbol, si lo hace puede morirse en una cancha”.
Y no jugó nunca más, retirándose con sólo 27 años. Un poco menos de 2 años más tarde, el 11.01.1992, y pese a seguir el consejo médico y abandonar la práctica activa del fútbol, murió a causa de esa misma afección cardiaca.
Grandote, con muchísima potencia pero bastante hábil y técnico con la pelota en los pies, goleador, aguerrido y al mismo tiempo poco tribunero. Algunos años después vi en el Turu Flores algunas cosas del Búfalo.
En San Luis es considerado casi un prócer (el estadio más importante de la provincia lleva su nombre), y fue, sin dudas, uno de los mayores símbolos del fútbol argentino ochentoso.

Update: Gracias Cucu por la foto con la camiseta de Boca

lunes, abril 09, 2007

Trivia Ochentosa Nº7

¿Quién es el colombiano de la foto?
No doy más pistas porque se haría demasiado fácil (?)

La respuesta: en 24 horas aprox
ARNOLDO IGUARAN, goleador de la Copa América Argentina ´87
Balón de oro(?): Ariel Walrus
Mención de honor:
bks que repartió pistas para todos los gustos (?)

miércoles, abril 04, 2007

De archivo

[click en la foto para agrandar]
Probablemente la primer entrevista al Cholo Simeone, publicada en EG Nº3578, de mayo de 1988.
Extrañamente, para lo que es el fútbol, no para lo que es el Cholo, las declaraciones muestran muchísima coherencia.
Ahora, Whitney Houston!!!!, ya veo que el bueno de Diego en vez de arengar a los jugadores con películas de Al Pacino, les pone El Guardaespaldas mientras a dúo con Nelson Vivas entona "endaaa, ia, we always love you" (?)